Queridos Padres:

Queridos Padres:

Queridos Padres:
Me llaman José pero vosotros me podéis llamar como queráis.
Dicen que tengo ocho años, pero yo preferiría tener tres o así, y por eso cuando venís a vernos me hago el bebé, no soy tonto, es que yo veo que los papis se ponen tiernos con los niños pequeños, les gustan más. Y hago monerías, hablo mal, e incluso si quieres me enseñas a hacer pis en el orinal, aunque ya lo sepa hacer en el water.
Queridos Padres, cada ve que las cuidadoras nos dicen que vienen unos nuevos papas se produce en mi cuerpo unas reacciones que no puedo controlar, me pongo muy nervioso, se me cae el pelo, y me salen algunos granitos, dicen que es por la ansiedad, llevo aqui demasiado tiempo, desde que nací, imagínate, toda una vida.
Mira lo que me dijo un amigo que ha venido alguna vez a visitarme. Que sus padres le han dicho que hay niños que los recogen antes incluso de nacer. Que se hacen en barrigas que no son sus verdaderas mamás para que unos padres les adopten. no es maravilloso? Ojalá hubiera sido yo de esos niños que nacen de unas barrigas desconocidas y no de una chica que me abandonó aquí.
Este amigo mío sabe de lo habla, porque fue mi compañero de habitación durante muchos años, a lo mejor durante dos años, pero él tenía la suerte de ser rubio y de ojos azules, y aunque ya era mayorcito cuando se fue, unos 4 años.
Yo hablo castellano, entiendo todo lo que me dices desde el principio.
Veo que hay niños en mi residencia que no hablan mi idioma, y esos también se van antes que yo, imagino que dan más pena los que han pasado por alguna guerra extranjera, o algo así.
Queridos padres, si no me cogéis pronto me mandaran a un piso en el que tendré que compartir casa con niños muy mayores que me pegarán para conseguir el mando de la tele, o que me insultarán por ser pequeño.
Además habrá tres cuidadores, una por turno, que no me arropará por la noche como lo hacen en la residencia, porque ya seré mayor para eso.
Queridos padres, qué duro es ser niño en estas circunstancias.
Dicen que tengo una gran mochila, pero yo miro mi maleta y no tengo nada, no pesa nada, sólo tengo una mantita de cuando era bebé, una caja de galletas en las que he guardado algunas piedras de formas bonitas y una foto de un bebé que dicen que soy yo. Te aseguro que cuando vaya a vuestra casa no os daré ninguna guerra, me lo comeré todo, no os haré enfadar, no gritaré, no saltaré, estudiaré mucho, dormiré bien, no tendré pesadillas, no lloraré, haré todo lo que me digáis. Pero por favor, llevadme ya.
Queridos Padres, os quiero mucho, seáis quienes seáis.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *